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Nota de los editores: ¿Por qué Spinoza hoy?

Nota de los editores Revista Topía 97 - Abril/2023

Padecemos una cultura que nos impone la novedad permanente como forma de vida. Todo tiene que ser o parecer nuevo. Una máscara de dominación mediante la dispersión de nuestra atención en supuestas primicias que son meras estrategias de venta. Navegando de pantalla a pantalla naufraga nuestra subjetividad en las aguas de la precarización. Encandilados por brillanteces que nos enceguecen. En ese camino, mucho de nuestra historia y memoria sólo se vuelve un mero recordatorio por algún aniversario mercantilizado.

La multitud por fin encarnada. O, de cómo Baruch de Spinoza se hizo marxista

Es altamente improbable que Karl Marx -“el filósofo de Tréveris”- haya podido ver el autorretrato perdido de Baruch de Spinoza -“el filósofo de Ámsterdam”-, en el que al parecer éste había colocado, en lugar de su rostro, el de Masaniello (Tommaso Aniello d’Amalfi), pescador napolitano que había conducido una masiva rebelión contra el virreinato español. De haberlo hecho, con toda seguridad hubiera incorporado una copia del retrato (se dice que Marx era un dibujante razonablemente apto) a ese curioso artefacto llamado los Cuadernos Spinoza. El joven Marx, en efecto, tenía la costumbre de transcribir en gruesos cuadernos, párrafos o citas de los pensadores que por alguna u otra razón le interesaban. Conocemos más de treinta de esos cuadernos. En el caso de Spinoza, reproduce largas citas del Tratado teológico-político, en una secuencia aparentemente arbitraria, y con la curiosidad ulterior de que firma el conjunto con su propio nombre, como si hubiera tenido la intención de publicarlo como obra suya. No vamos a psicologizar a Marx hablando de una obvia identificación -ya que poner su nombre en lugar del otro no es poca cosa-. Limitémonos a decir que es una operación intelectual notable: no se trata desde ya de un burdo plagio, sino de un montaje que anticipa en casi un siglo ciertos recursos surrealistas, o más específicamente el Libro de los Pasajes de Benjamin.

La potencia del individuo concreto conserva toda su irreductible singularidad, pero está  “sobredeterminada” por la potencia de la multitud

 

La actualidad de lo eterno

Quien contempla las cosas no sólo de acuerdo al orden en que es afectado por ellas, sino también a la potencia específica que puede descubrir en ellas, transita entre dos perspectivas: la que se percibe en la experiencia y la que descubre como propia del orden causal. Este ir y venir entre la capacidad de ser afectado y aquello que la meditación sobre lo que la cosas pueden, es el ámbito en el cual el humano puede acceder a una cierta impresión de ser eterno. El brillo de todo aquello que aún no existe y ya puede ser pensado se presenta en esta eternidad como un tipo particular de realidad que no se nos ofrece en la duración. El spinozismo es la tensión del arco cuyos extremos son los padecimientos del cuerpo y los destellos de la mente (tensión incompatible con la acción restrictiva de los poderes sobre lo real). Su actualidad es la de una práctica reflexiva que consiste en perfeccionar el deseo de aquellas existencias virtualmente contenidas en los pliegues de lo que ocurre. Spinoza trata de la actualidad de lo eterno.

Las pasiones,  afirma Spinoza, deben ser comprendidas intelectualmente antes que juzgadas  moralmente.  Son hechos del cuerpo

Humanismo crítico

En su último libro, Humanismo, impugnación y resistencia (Colihue, 2021), Horacio González nos invita a pensar en la idea de un humanismo crítico. Se trata de convocar a un movimiento de pensamiento colectivo, que busque en distintas tradiciones y estilos de reflexión las bases para un anti-capitalismo reformulado. González proponía relanzar la noción de humanismo, pero agregándole el adjetivo crítico, para interrumpir las asociaciones más inmediatas que genera una palabra ya demasiado gastada. Esta convocatoria a una renovación vital del pensamiento es un llamado a volver a pensar lo que se pensó y, sobre todo, lo que no se pensó en los debates entre humanismos y anti-humanismos que se dieron en las épocas filosóficamente más vitales del siglo XX. 

Se perciben muchas resonancias spinozianas en estos escritos marxianos, incluso en la alusión final a una fórmula que tanto Spinoza como Feuerbach toman de lo que sería un humanismo clásico: el hombre es un Dios para el hombre.

Sobre el Cuerpo Alien. Spinoza y lo indefinible como posibilidad

Pensar Spinoza. Pensar su obra magna. Una ética demostrada según el orden geométrico. Sólo con tomar su título, esa frase larga que muchos editores decidieron sintetizar en un sólo significante “Ética”, ya podemos hablar, debatir, y soltar ríos de tinta en la problematización de lo que allí parece emerger. Ludwig Wittgenstein dijo una vez, quizá un poco en serio, un poco en broma, a pesar de su carácter hosco, que “si un hombre pudiera escribir un libro de ética que realmente fuera un libro de ética, este libro destruiría, como una explosión, todos los demás libros del mundo.” Pues bien, o Wittgenstein estaba equivocado en su sarcasmo especulativo, o la Ética de Spinoza no es ese libro. O quizá, por qué no, una tercera posibilidad: Wittgenstein tenía razón y no puede existir un libro preciso, exacto y detallado sobre la felicidad, sobre la mejor vida posible en un sentido estricto, a la vez que Spinoza nunca tuvo la intención de escribir un texto objetivo que cumpliera con dicha precisión. Tal posición me parece más concisa.

¿Qué es entonces esto que denomino cuerpo alien? Podría decir que se trata de una subversión, o más bien, de una postura que rompe una lanza en favor de la capacidad de los cuerpos de escapar, desde un punto de vista cualitativo, a aquello que la mente pretende definir de ellos

La verdad… ¿y nada más que la verdad?

De cómo Spinoza nos legó, hace cuatro siglos -y entendemos que sin saberlo- una epistemología para comprender lo que pasa con el discurso político en las redes sociales.

“Nada de lo que tiene de positivo una idea falsa es suprimido por la presencia de lo verdadero, en cuanto verdadero.”

Cualquier intento por relativizar el valor de la verdad -o de lo verdadero, como más modestamente propone Baruch de Spinoza desde las páginas de su Ética demostrada según el orden geométrico, escrito entre 1666 y 1675- merece, como por una especie de acto reflejo, al menos nuestra sospecha.

En tiempos de la llamada posverdad, esta idea spinoziana de que con la verdad no alcanza, parece poner bajo seria amenaza algunos de los más caros presupuestos de nuestra cultura racional y nuestro principio de realidad, y tiene incluso resonancias morales y éticas

De la cigüeña al útero artificial

Por muchos años se trató de ocultar el origen de los niños, es decir, se omitía que es consecuencia del coito de los padres. En el saber popular han existido múltiples cuentos o mitos que separaban la sexualidad del nacimiento de un bebé. Por ejemplo, los padres mandaban una carta a París y la cigüeña traía desde allí al niño. Lo dejaba en el patio lejos del lecho conyugal, no deja de ser gracioso que la capital francesa sea conocida como “La Ciudad Luz”. En otras versiones los padres sostenían que el niño llegó dentro de un repollo. En las épocas en que el pudor imperaba, este tipo de explicaciones eran las que se les daba a los niños ante el advenimiento de un hermano. Durante mucho tiempo fue difícil digerir culturalmente la relación entre la procreación y la sexualidad de los adultos, en dichos momentos la magia como explicación sustituyó la verdad.

La procreación fue empujada históricamente por los poderes de turno hacia “una fábrica de hijos” que respondiera a sus intereses desde el momento mismo del nacimiento

¿Por qué sigue habiendo crímenes de odio en Argentina?

Se conocieron los nuevos datos del Observatorio Nacional de Crímenes de odio LGTBI. En Argentina fueron 129 los asesinatos por tener una identidad o vivir la sexualidad por fuera de la heteronorma. ¿Cuáles son los factores y en qué se está fallando?

¿De dónde sale el concepto? A principios de la década del ochenta en la legislación de algunos países anglosajones, por impulso de la militancia LGBT, empezaron a introducirse figuras legales para visibilizar delitos motivados por el prejuicio, la aversión y la discriminación hacia determinadas víctimas

León Rozitchner siempre estuvo en veredas opuestas de las hegemonías

Entrevista a Alejandro Vainer por Mario Hernández

Al cumplirse 11 años del fallecimiento de León Rozitchner entrevistamos a Alejandro Vainer de la revista Topía

Al día de hoy es más valida todavía, en su momento lo era, pero considerando que alguien que ha trabajado fundamentalmente cómo el poder se mete dentro de nuestro cuerpo y nuestro psiquismo y desde allí opera

Es quien mejor expone cómo poder interrelacionar Marx, Freud, el poder, la subjetividad, los cuerpos y que es un autor de una absoluta actualidad.

Estallido social chileno: Clínica, política y militancia

El octubre chileno es un acontecimiento histórico que la mayoría de lxs chilenxs sabíamos que en algún momento - tarde o temprano- iba a ocurrir. Hablamos de una ruptura radical con la normalidad capitalista. Un cuestionamiento generalizado a un modo de vida que nos impusieron a sangre, fuego y balas hace 48 años a través de un golpe de Estado, dando inicio a una dictadura cívico-militar por 17 años. La implementación del modelo neoliberal, amarrado jurídicamente en la Constitución de 1980, solo se pudo lograr vía el terrorismo de Estado (desapariciones, asesinatos, torturas, exilios, secuestros, violaciones), impidiendo de esta manera cualquier tipo de resistencia por parte de las fuerzas sociales y políticas revolucionarias. Reinstaurada la democracia, al contrario de las demandas de los movimientos sociales de superar la herencia del modelo político-económico ideado por Milton Friedman y los Chicago Boys, los gobiernos concertacionistas consolidaron el sistema neoliberal, profundizando de esta manera las desigualdades sociales, la pobreza, la mercantilización de derechos sociales, el extractivismo, los valores individualistas, consumistas, competitivistas, meritocráticos, la despolitización de la sociedad, tecnificación de la política, etc. Pero, por otro lado, en paralelo a ese proceso de “neoliberalización” de la sociedad que se estaba organizando por arriba, por abajo se estuvieron desarrollando experiencias de lucha y organización popular desde diversos sectores: pobladorxs, mujeres, jóvenes, estudiantes, trabajadorxs, jubiladxs, mapuches, activistas, entre otrxs, que venían denunciando las consecuencias de la dictadura en diversos ámbitos de la vida. Después de años de acumulación de fuerzas, en octubre de 2019 se transversalizaron los malestares, produciéndose una disposición colectiva que se expresó fundamentalmente en una guerra anímica frente al Estado neoliberal pinochetista. De esta manera se traspasan las barreras de los límites de lo posible. La normalidad ya no es capitalista. La voz de Salvador Allende se vuelve a escuchar en las calles: Las grandes alamedas se volvieron a abrir.

El presente texto se sirve del estallido social chileno como excusa para reflexionar sobre la articulación entre tres variables cuya relación, tanto dentro del campo de la salud mental como de las izquierdas, suele ser desestimada, ignorada o derechamente rechazada. Hablamos de clínica (o salud mental), política y militancia.

 

Nota de los editores: Elogio de la alteridad

Nota de los editores Revista Topía 96 - Noviembre/2022

Vivimos en una cultura que reniega o demoniza a los otros. La entronización de la era de Narciso tiene consecuencias sobre nuestra subjetividad. Por un lado, no ver más allá del propio ombligo reflejado en los espejos oscuros que nos circundan. La placenta mediática en la que vivimos es un laberinto donde nos perdemos entre espejos donde los otros se vuelven imágenes evanescentes. Y allí caemos en las redes donde lo familiar se vuelve siniestro. Empezamos a ver a todo y todos los que quedan “afuera” de nuestras imágenes como amenazantes de nuestra ilusión de la felicidad privada espejada.

Ir más allá de los “otros”

Vivimos entre los otros, vivimos con los otros, ¡somos los otros! En estas tres frases podría resumirse la esencia del ser humano que es siempre y en todo caso un ser social, un in-dividuum, es decir, un ser indivisible en su propia singularidad y su socialidad. El ser humano está en relación recíproca con otros seres humanos, y recordemos que, en alemán, “relación recíproca” es Gemeinschaft, que también significa “comunidad”, y para Kant, Gemeinschaft es una categoría de la relación. Los seres humanos forman comunidades porque comparten una naturaleza social, viven en una relación mutua continua e inquebrantable.

El odio a los demás debe basarse en motivaciones más profundas, que ponen de relieve nuestra naturaleza más profunda, y si el odio llega a convertirse en una ideología, se convierte en racismo

Colombia y la cuestión LGTBI: las calles marcan el camino

Plantear desde el vamos que tenemos un debate entre lo urgente y elemental, y las soluciones estructurales a los problemas que atravesamos las personas trans.

La dinámica de las leyes para la izquierda revolucionaria como un puntapié para ir por más, no como un fin en sí mismo. Plantear los aspectos progresivos, y qué límites se mostraron en lo real.

La dinámica de las leyes para la izquierda revolucionaria como un puntapié para ir por más, no como un fin en sí mismo

Y todo es del Otro. Categoría y poder

Un famoso fragmento de A través del espejo hace patente por su absurdo cierta inevitable y cotidiana relación entre el poder y la significación. El diálogo es el siguiente:

Cuando yo uso una palabra -insistió Humpty Dumpty (…)- quiere decir lo que yo quiero que diga…, ni más ni menos.

-La cuestión -insistió Alicia- es si se puede hacer que las palabras signifiquen tantas cosas diferentes.

-La cuestión -zanjó Humpty Dumpty- es saber quién es el que manda…

Pero supondremos que de este lado del espejo las cosas -algo más impersonales- suceden de un modo análogo, aunque no respecto del significado de las palabras sino de las categorías que ordenan nuestro pensamiento y nuestros actos. Al menos cuando no hay un esfuerzo crítico que nos prepara para evitarlo. Y esta es, precisamente, la suerte de la categoría el “Otro”. Qué esté en mayúscula y en singular hacen fácilmente comprensible que tal categoría no señala a un existente identificable. Nadie duda que existen los otros, los demás, todos aquellos con quienes puedo relacionarme, pero nada podría identificar en el mundo que sea el Otro.

La reflexión que intentan estas páginas es la del sentido político que el uso acrítico de la categoría el Otro supone en nuestra actualidad

Mi Amigo de Facebook y mi Vecino de Al Lado

Desconocemos qué oscuras fuerzas nos impulsan a discutir en Facebook. O al menos, lo desconocemos -nos desconocemos- en el preciso momento en que decidimos hacerlo, sabiendo de la futilidad de semejante acto. En fin, lo que caracteriza a cualquier acción compulsiva. En el muro de un amigo -término resignificado por la propia red social, que nos habilita a aplicarlo a personas de cuyas vidas no conocemos más que fragmentos de lo que decide publicar- con el que creía tener cierta afinidad ideológica, crecían los ataques contra “el progresismo”. El progresismo, se decía ahí, cree que la agenda de derechos de género es más importante que la agenda económica, y así estamos.

Quién es ese otro al que debemos señalar, automáticamente, como “enemigo”

Claustrofilia y Tempo

Con el wasap tenemos un ejemplo por demás iluminador sobre cómo se acelera el tiempo, quién recibe el wasap, al estar gobernado por la impaciencia, apura la velocidad del mismo. El usuario cyborg puede escucharlo en tres velocidades distintas, una más rápida que la otra. A cada aumento de la velocidad más distorsionada sale la voz de quién nos contacta, en la última ya no reconocemos tonos, ni matices de quien nos está diciendo algo. Esto aumenta aún más la distancia afectiva entre emisor y receptor. En la misma dirección hoy se ha instalado un pequeño ritual: no es conveniente hablar directamente por teléfono, hay que mandar un wasap preguntando si el otro puede hablar. Su confirmación habilita el llamado.

El tempo propio (más cercano a los latidos del corazón) queda anulado por las prótesis que amamos. Éstas marcan un tempo que no es propio, sino que nos acelera hasta llegar a producir grandes perturbaciones en nuestra subjetividad

Psicoanálisis y biotecnología: Consideraciones acerca de la aportación anónima de gametas

El psicoanálisis como terapéutica convirtió a la familia en objeto de investigación lejos de la idealización burguesa en la Viena del comienzo del siglo veinte donde Sigmund Freud instauró un modo nuevo de abordar el sufrimiento.

La tecnología interviniendo en la reproducción humana propone desafíos a la praxis psicoanalítica ante transformaciones sociales que interpelan lo simbólico

Discursos escuela y afectos

Toda palabra designa al otro. De entrada, una palabra altera, produce todas las alteraciones, contemporiza con el prójimo, provoca alteridad. El movimiento que nombra al otro altera. El movimiento que nombra al otro altera ese movimiento y al otro

Un modo de entender lo que sucede en las escuelas o el modo como las escuelas proceden en su función de impartir educación a la población, es a partir de lo que dicen los discursos sobre ella. Discursos por cuyos enunciados se ocultan intereses: ¿de clase, de género, económicos, empresariales, de poder?, se persiguen determinados fines ¿criticar, dominar, gobernar, disciplinar, controlar?, se buscan diversos desenlaces y efectos ¿generar una población obediente, educada, productiva, emprendedora?

La escuela como institución reproductora del arbitrario cultural dominante, lo cual genera en su población seres reproductores de una moral y de unos valores que no siempre condice con sus orígenes, clase, etnia, genero, etc.

Patologizar es el medio, sus analgesias la red

Con el título Patologizar es el medio y sus analgesias la red, disparamos a modo de provocación crítica, la introducción paradojal con que señalamos aquella articulación hegemónica entre el campo de la comunicación y el de la salud, toda vez que es regida por la rentabilidad y el mercado.

La frase “el medio es el mensaje”, a partir de los 60´ fue santificada por el mercado, pues los milagros que su mercantilización conseguiría serían inigualables en ganancias. Así el paradigma de los medios, en clave de comunicación masiva, regirá prontas expansiones y alianzas estratégicas hacia el Modelo Médico Hegemónico, quien privilegiará al paradigma en virtud de la masividad que le aporta, y que ambos mercados necesitan para consolidar su posición dominante.

los sectores capitalistas y financieros del complejo médico-industrial, especialmente las farmacéuticas, han apostado con sus estrategias de marketing, mercadeo y penetración comunicacional masiva, a la optimización de los procesos de producción subjetiva social para generar demanda de consumo

El fin de la ilusión progre sobre la Ley de Salud Mental

Nota de los editores Revista Topía 95 - Agosto/2022

La Ley Nacional de Salud Mental Nº 26.657, herramienta legal para un cambio de paradigma en la atención de las problemáticas de salud mental, sancionada en el año 2010, contó en su momento de elaboración y sanción, con el ferviente apoyo de quienes integramos la Revista Topía, fijando una clara posición ante nuestros lectores.

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