Una larga y estrecha asociación une al crimen con la política. Esta asociación se halla en el lenguaje corriente, en la sospecha colectiva y en los atributos persistentes del sentido común. Mucho menos se halla en la reflexión de los tratadistas o politólogos. Como si no existiese una posibilidad cierta de reunir en categorías de indagación y reconocimiento a estos hechos de dominio espontáneo en la lengua coloquial, periodística o familiar.
Cuando Enrique Carpintero -director de Topía- me llamó por teléfono proponiéndome escribir para la revista, se produjo un equívoco: entendí que el tema sería “Delincuencia y cultura” y ya estaba enredado en el convite cuando caí en la cuenta que se trataba de “Delincuencia y política”; acepté con la intención de valerme del fallido.
El significado de la palabra política está íntimamente ligado a la genealogía de la cultura occidental: política: discurso y práctica de la polis. Y en esta acepción original, lo primero que emerge como referencia es el espacio, tanto teórico como fáctico de ese discurso y de esa práctica, es decir, la Ciudad como su escenario privilegiado, con toda la carga que supone el desplazamiento metafórico de un término propio del lenguaje teatral al discurso sociohistórico.
"Felices Pascuas, la casa está en orden"
Raúl Alfonsín -Plaza de Mayo
Con esta frase el presidente democrático que había ordenado el juicio a los comandantes genocidas, dio por terminada la movilización popular, que se oponía al levantamiento militar de Semana Santa.
La cita de Freud viene al caso. Poco después aparecieron las leyes de punto final y obediencia debida y más tarde el indulto a los únicos condenados por las treinta mil víctimas (sin contar las víctimas vivas -exilio exterior e interior), ya en el gobierno del Dr. Menem.
"Os aconsejo que vengáis conmigo a ver el Presidente de la honrada Hermandad y que no os atreváis a robar sin su permiso, ya que esto os resultaría caro. ¿O acaso creísteis que el robar era una profesión liberal sin impuestos ni contribuciones?"
"Todos nos creemos uno; pero...no es verdad, sino que somos muchos."
Pirandello
1- LOS OBJETOS FETICHES
Nuestra época se caracteriza por la importancia que tiene la representación: no es importante lo que hacemos sino como representamos lo que hacemos. De esta manera la realidad se ha ligado a la representación de tal forma que creemos que esta es la realidad.
La globalización de la economía y los avances tecnológicos, especialmente los mass-media electrónicos, aproximan universos de toda clase, situados en cualquier punto del planeta, en una variabilidad y en una densificación cada vez mayores. Las subjetividades -independientemente de su morada- tienden a ser pobladas por afectos de esta profusión cambiante de universos; un mestizaje constante de fuerzas delinea cartografías mutables y pone en jaque a sus habituales contornos.
Tomar un café con un colega es una de las pocas instituciones que se mantienen en nuestro medio.
Verlo llegar, demacrado y más flaco, fue una ingrata sorpresa. No tuve que preguntarle como andaba. Ni bien se sentó empezó a vomitar su alma:
-Estoy muerto. Cada vez los prepagos y O. Sociales para los que trabajo pagan menos. Ocho mangos, vos podés creer. Y alegrarme, eso va con los ocho, porque tengo laburo y no estoy pendiente del par de pacientes “privados”. Sacá tu calculadora y haceme una cuentas.
Topía Revista entrevistó, gracias a la Fundación Centro psicoanalítico Argentino, a la Dra. Raquel B. de Hodara profesora israelí, especialista internacional en el tema de campos de concentración. Lo que sigue es un profundo análisis del nazismo y el Holocausto.
Realidad e interpretación
Holocausto quiere decir: “un sacrificio ofrecido a Dios”, esa es la traducción que aparece en la Biblia; desafortunadamente se arraigó este término, que lo menos que quiere decir es “sacrificio a Dios”. Para aclarar lo llamamos Shoa, que quiere decir: “catástrofe”.
Desde hace cinco años (1992), los argentinos vivimos al amparo de la convertibilidad cambiaria. Bajo ese manto de alegrías es que votamos una reforma constitucional (incluida reelección) y le agradecimos a Menem haber inventado el voto cuota. Obvio es que tuvimos un sinnúmero de elecciones de legisladores, gobernadores, intendentes y hasta barrenderos, haciéndolo siempre bajo la advocación de la Santa Convertibilidad.
En el último nº de Topía he leído su opinión sobre el artículo El psicoanálisis en Matías y Mafalda, firmado por César Hazaki, y que apareciera publicado en el nº anterior de la mencionada revista. Dice allí que al referirse a Mafalda, Hazaki produce conclusiones que nada tienen que ver con el espíritu con que Ud. dibujó las tiras.
"Señores, ¿Os place escuchar un bello cuento de amor y de muerte? Es de Tristán e Isolda, La Reina. Vean cómo, en gran alegría, en gran duelo se amaron; murieron, después, un mismo día, él por ella, ella por él."
EDITORIAL: La cólera neofascista y la trama corposubjetiva en la que se desarrolla el miedo. Enrique Carpintero
DOSSIER: LA POTENCIA DE LA ALEGRÍA EN TIEMPOS DE CÓLERA Cristián Sucksdorf, Tom Máscolo y César Hazaki Además escriben:Ariadna Eckerdt, Juan Duarte, Mabel Bellucci
Trotsky y el psicoanálisis. Helmut Dahmer
ÁREA CORPORAL: Signos de identidad. Tatuajes, piercings y otras marcas corporales. David Le Breton
TOPÍA EN LA CLÍNICA: EL PSICOANÁLISIS A DISTANCIA TRAS LA PANDEMIA. Eduardo Müller, Marina Calvo, Lucía Plans y Agostina García Serrano
Carla Delladonna (compiladora), Rocío Uceda (compiladora), Paulina Bais, María Sol Berti, Susana Di Pato, Marta Fernández Boccardo, Romina Gangemi, Maiara García Dalurzo, Bárbara Mariscotti, Agustín Micheletti, María Laura Peretti, Malena Robledo, Georgina Ruso Sierra