Ayer 30 de abril se cumplieron 90 años del nacimiento de Félix Guattari, psicoanalista pensador filosofo militante. Sobre todo, un clínico del quehacer transversalizado. Un estudioso incansable. Mi encuentro con Guattari estuvo de la mano del análisis institucional. Fue en principio un toque…un breve encuentro…apenas se diferenciaba del resto… Su concepto de transversalidad pronto fue un recurso de aplicación clínica tanto en el análisis institucional como en los grupos y en los pacientes individuales. Desde ahí aparece el Antiedipo. Así fue que comenzó a adquirir otra dimensión, adquirió volumen, corpulencia… Fueron los años en los que florecía la anti psiquiatría en el mundo occidental y los vientos de cambio pegaron fuerte en nuestro país. Aquí se emparentó con un movimiento político militante que abarcó todos los estamentos sociales y por ende a los que comenzaron a nombrarse como trabajadores de la salud mental. Este movimiento no dividía la atención de la salud mental de una práctica comunitaria que deriva inevitablemente en pensar la salud mental como un bien colectivo madurado desde la propia producción subjetiva de esa comunidad. En este sentido la salud mental es pensada como una producción cultural. La consigna que atravesaba cualquier práctica era Liberación o dependencia englobando en los mismos distintos grupos sociales y distintos grupos políticos. Y es así como resplandecen prácticas micropolíticas alternativas en el terreno de la salud mental que incluyen lo comunitario en sus múltiples expresiones.
Pero ¿qué se cuestiona? ¿El psicoanálisis en sí? ¿La ciencia y el método que tiene por objeto teórico el inconsciente, con todas sus implicancias? Se cuestionan las omisiones que comete el pensamiento psicoanalítico y su práctica, las afirmaciones fuera de contexto, el psicoanálisis puro que piensa al sujeto fuera de su momento histórico, social. El elitismo, el aislamiento, la cofradía, la corporación, el credo.
Pero todo se oscureció. En nuestras vidas, en nuestra práctica, en la política, en el arte, en la literatura. El golpe cívico militar que asolo nuestro país entre los años 1976-1982 hizo desaparecer no sólo personas sino también prácticas y teorías y una forma de pensar el mundo.
Años más tarde, luego del largo invierno, los textos de Guattari junto con Deleuze, más tarde Spinoza colocaron palabras ideas pensamientos teóricos a aquello que daba cuenta de una formación teórico clínica de toda una generación de psicólogas/os psicoanalistas que pensaban que las condiciones de existencia formaban parte del inconsciente.
En un psicoanálisis histórico, social y político.
Guattari participa de los seminarios de La Sorbona y se aproxima a la obra de Freud a través de Lacan. Es uno de los primeros no médicos que participa de sus seminarios cuando abandona sus estudios de farmacia. Fue su paciente e integra la Ecole Freudiana de París fundada por el propio Lacan y alcanza el título de Analista Miembro de la Escuela. Es admirador de Sartre cuyo legado lo encontramos muchas veces en la lectura de sus textos. Abandona su trabajo con pacientes individuales y se vuelca totalmente a incorporarse a la Clínica de La Borde (Cour Cheverny, Francia), junto con Jean Oury y al trabajo con pacientes considerados graves. Militante marxista, contemporáneo del mayo francés, no incorpora al psicoanálisis lo político, sino que revela que lo político es condición de producción del inconsciente mismo. Crea y recrea diferentes definiciones de inconsciente que lo apartan de los desarrollos del psicoanálisis de su época. Incorpora la idea de un inconsciente maquinico. En sus textos aparece todo el tiempo la clínica del trabajo sobre la clínica. Se propone y propone reconstruir otra teoría de la enunciación. En esta empresa invierte el punto de vista de la lingüística y de la filosofía del lenguaje. La enunciación no es una realización individual del fenómeno de la lengua. “Todos somos grupúsculos”.
El capitalismo no es sólo un modelo económico sino que produce un tipo de subjetividad capitalista. Que modela las mentes y los cuerpos. No estamos hablando solo de economía. Existen modalidades de expresión que unidas a las semióticas significantes operan políticamente. Su pensamiento intenta atravesar el concepto de representación, anudada a códigos alejándose de aquello que tiene que ver con lo impensado.
Los planos. Los flujos. Las líneas. Los territorios existenciales. Sensibles. Las cartografías. Sus coordenadas. Los universos incorporales. Los contenidos y las expresiones.
Valga este homenaje en el día del trabajador a Félix Guattari. Y a todas y todos los trabajadores que intentan cambiar sus condiciones de existencia.
Murió en La Borde el 29 de agosto de 1992, su pasión y su destino…
Ana del Cueto.
1 de mayo de 2020.
6°semana de cuarentena.
Ciudad de los Buenos Aires, Argentina