La emergencia del feminismo y del movimiento de mujeres en Argentina y en el mundo, no es un hecho episódico. El 3 de junio de 2015, la denuncia y demanda contra los femicidios bajo el lema de #NiUnaMenos constituyó un acontecimiento que tuvo ecos en todo el mundo, desde Estados Unidos hasta la Patagonia, desde Arabia Saudita, hasta Turquía, Rusia, los países europeos y algunos países de África.
En la actualidad, la participación de las mujeres en la escena política de los diferentes países da cuenta del surgimiento de una nueva oleada de luchas feministas que revoluciona tanto las agendas políticas como la vida cotidiana y recoge la experiencia de otros momentos históricos en donde las mujeres agenciadas en sus reivindicaciones contra la explotación y la opresión, la subordinación y la discriminación de género, lograron grandes conquistas.
La invisibilidad del trabajo de las mujeres es parte del orden patriarcal que otorga a las acciones y experiencias femeninas menor relevancia social que a las masculinas, o sencillamente las ignora... En el caso de las trabajadoras ferroviarias se expresó en la dificultad de las mujeres de “salir” de los puestos de limpieza que son los peor pagados.