Para abrir la partida, debo confesar que este artículo iba a llamarse inicialmente “Hay ´no cuerpo´” haciendo juego con la sentencia lacaniana Hay “no-relación sexual”. Luego iba a llamarse “El sujeto no es el cuerpo”. Pero al final me decidí por un título más glamouroso y menos polémico o controversial. Lo cierto es que hoy nos haremos una pregunta por el cuerpo, un cuerpo que pereciera ya no ser requerido para hacer lazo social, o por lo menos no en su totalidad, ni en su dimensión material, tangible y cárnica.
Nos haremos la pregunta por ese cuerpo que se juega en las relaciones virtuales; y, sobre todo, los cuerpos que ya no reconoce los límites de la privacidad ni la intimidad