Lo dijimos una y mil veces, la universidad no es ni debe ser una isla. Por el contrario cada día más es una caja de resonancia de importantes temas nacionales en debate. Uno de ellos es la explotación minera.
Por una resolución del Consejo Interuniversitario Nacional del 2009, las universidades nacionales del país deberán recibir fondos provenientes de la mina Bajo La Alumbrera (empresas Yacimientos de Aguas del Dionisio-YMAD y Alumbrera Limited), ubicada en Catamarca.
La Alumbrera es una mina de explotación a cielo abierto. Anualmente su ganancia es de alrededor de 1.600 millones de dólares dejando regalías del 1,5%. Gracias a la incansable lucha de los vecinos y de distintas organizaciones de la zona afectada, Catamarca -recordemos Andalgalá-, Tucumán y Santiago del Estero, todos tenemos conciencia de las consecuencias de éste tipo de explotación del suelo.
Incluso, ya en marzo del 2007, la Secretaría de Minería perteneciente a la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación, señaló “un grado de perturbación fuerte en las actividades económicas del área, y en el valor ambiental medio”. Producido por esta empresa en la provincia y la región.
Los graves impactos ambientales a que se refiere son la contaminación de aguas por presencia de altos valores de cobre, sulfatos y molibdeno, cadmio, hierro, manganeso, plomo, cinc, concentraciones de sólidos metales disueltos (SDT), arsénico y boro, todo en concentraciones que violan lo planteado en legislaciones vigentes como ser la ley nac. 24.585.
Cáncer, enfermedades de vías respiratorias, de piel y malformaciones genéticas son las terribles consecuencias de esto en la salud de la población.
Además la producción de Minera Bajo La Alumbrera consume 100 millones de litros de agua diarios y el 25% de la energía eléctrica de la Región del NOA.
Sin embargo, la producción de la mina avanza como sus consecuencias de muerte en la zona.
Este cuadro que para la mayoría no deja lugar a dudas, sin embargo no alcanzó para modificar la decisión de los que detectan el poder en la UBA ni en la propia Facultad de Psicología.
Tampoco los conmovió la resolución de otras, pocas por cierto, Universidades Nacionales y facultades que resolvieron rechazar estos fondos “contaminantes”.
La aceptación de financiamiento no es inocente y sus consecuencias son gravísimas en el rumbo de la mayor universidad pública del país. No se trata de una cuestión presupuestaria. El problema es mucho más profundo. Peso más, peso menos, aceptar esos fondos implica la complicidad con estos capitales mineros, el avance concreto de políticas privatizadoras en la UBA y la consecuente entrega de la autonomía de pensamiento y producción científica a intereses foráneos. A la vez, se convalida la explotación de Minera Bajo La Alumbrera, incompatible con la vida de las poblaciones del norte de la Argentina y la destrucción del medio ambiente, de las condiciones de vida de los pueblos de la zona y el saqueo de los recursos naturales.
Consecuentes con la defensa de la universidad estatal pública y gratuita y de la salud de la población y el planteo de una universidad al servicio de los intereses de las mayorías nacionales, Psicólogos En Frente * llevó este debate al seno de nuestra Facultad. Por esto presentamos al Consejo Directivo de Psicología, junto a los consejeros estudiantiles, un proyecto para rechazar la aceptación de estos fondos.
El tema lamentablemente sigue pendiente y los fondos no han sido rechazados. Mantenemos nuestra postura y llamamos a todos los que acuerden a enviar su adhesión a psicologosenfrente [at] gmail.com
para seguir con la campaña.
Colega Graduad@: Si aún no lo hiciste empadronate para elegir tus representes: de 10 a 18 hs en 2º piso de Hipólito Irigoyen 2032, con DNI
* Psicólogos En Frente – espacio integrado por Apel, Revista Topía , Germinar e independientes- integra el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología de la UBA como Minoría del Claustro de Graduados.