Irma: exitosa abogada de 63 años. Tres matrimonios, tres hijos, divorciada. Una mujer que si bien, no es muy bonita, conserva rasgos de haber sido una persona atractiva para los hombres (luego verificaría que mi percepción había sido acertada). Hoy parece haber abandonado su lugar en el campo de la seducción y de la búsqueda de las miradas masculinas -o las de todos- en cuanto a su descuido en la apariencia, no así en cuanto a su desempeño intelectual y la esgrima inteligente con que maneja su pensamiento.
Para que el paciente piense acerca de las causas que lo tienen triste/deprimido es necesario el investimiento narcisista de su actualidad y también del futuro, de modo que el cambio y la alteración tengan sentido