Este texto está compuesto en su mayor parte por artículos que fueron leídos ante diferentes auditorios. Es decir, palabras dichas desde el cuerpo. De ahí la fuerza de algunas de sus frases que llevan al lector a implicarse en la necesaria tarea de recordar el porqué y el para qué de su práctica como ciudadano y profesional en la actual crisis de nuestra cultura. De esta manera, al desarrollar los efectos de la cultura dorninante, Alfredo Grande afirma la doble dimensión libidinal y política de la castración edípica: "La cultura represora condenó a todos ellos (inocentes latentes) para que vieran en la maestra a la segunda madre, implícita prohibición de no verla como la primera mujer". Es así como con el psicoanálisis implicado Alfredo Grande dice lo qiie Spinoza formuló en una frase: "El concepto de perro no ladra". De ahí las preguntas que se formula: ¿Qué hacer ante el dolor de los pacientes, no slo ante la realidad psíquica, sino social?. ¿Cómo responder a la demanda de instituciones que se sostienen desde un poder del saher? ¿Cuál es el lugar de los nuevos dispositivos psicoanalíticos que permiten dar cuenta de nuevas sitomatologías que desborden la práctica psicoanalítica tradicional? Intentar algunas respuestas posibles es uno de los objetivos del presente texto.